La política latinoamericana fue el punto de partida del diálogo que mantuvo el ex Presidente Rafael Correa con Xavier Lasso, en el programa Palabra Suelta. Lamentó la excesiva represión a las protestas contra el gobierno de Iván Duque en Colombia, sin dejar de reconocer que nunca faltan infiltrados que generan mayor violencia, pero que pese a ello se debe respetar y garantizar el derecho de quienes protestan de manera pacífica.
Así también, indicó que la victoria del referendo constituyente en Chile no necesariamente implica el fin del neoliberalismo, pues hay una gran mayoría de independientes que podrían inclinarse por continuar con ese modelo. Por último, se refirió a Brasil, donde el ex presidente Lula Da Silva anunció que volverá a postularse al cargo una vez ratificada su inocencia, luego de la persecución política por parte del gobierno de Bolsonaro: “El lawfare roba la democracia a los países, como sucedió en Brasil, como sucede en Ecuador. Creo que Lula va a ganar”.
Luego, el diálogo se enfocó en la coyuntura política nacional. Correa reconoce que hubo errores en la campaña de Fuerza Compromiso Social en la segunda vuelta de las elecciones generales, y considera que la presidencia del movimiento debe recaer en alguien que resida en el Ecuador para que pueda organizar y motivar a la militancia.
Por otra parte, opinó que la inocencia de los hermanos Isaías “es una vergüenza y nos demuestra en qué situación han dejado al país (…) Esa justicia que condena inocentes también absuelve a los culpables”.
Sobre el fallido acuerdo de gobernabilidad con el presidente electo, Guillermo Lasso, indicó que fue este quien faltó a su palabra por presión de la prensa. Reveló que el 6 de mayo Lasso se reunió personalmente con Jaime Nebot en la casa del asambleísta Henry Kronfle, y que él participó del encuentro vía telefónica. “Hablamos de un acuerdo de gobernabilidad siempre y cuando se conforme una comisión de la verdad, y me dijo que con o sin acuerdo no permitiría más lawfare, más persecución, estaba tan desesperado por concretar un acuerdo que esa misma tarde mandó un avión por nuestros representantes. Se selló el acuerdo, quedamos en hacer un comunicado precisamente para que no haya compra de conciencias, pero ni siquiera llamó a decir que se había arrepentido, no dijo nada y pactó con Pachakutik y los independientes”.
Según su análisis, los tres errores con los que Lasso empieza su mandato son: haber perdido su credibilidad, traicionar al PSC, y haber creado una mayoría antinatura que puso a Pachakutik en la presidencia de la Asamblea Nacional. Afirma que con ello les dio el mejor incentivo para crear incidentes, porque ahora PK es tercero en la línea de sucesión a la Presidencia de la República.
Correa se muestra convencido de que, a pesar de ello, Lasso contará con el apoyo de la prensa y las élites, que lo sostendrán en el poder tal como lo hicieron con Lenin Moreno.