Rafael Correa, ex presidente ecuatoriano y líder del movimiento de la Revolución Ciudadana, se dirigió al pueblo esmeraldeño a través de la señal de Telecosta, donde aseguró que el plan para inyectar liquidez del binomio Aráuz – Rabascall es la vía para superar la crisis económica que enfrenta el Ecuador y que, por el contrario, el plan de la oposición significaría prolongar esta situación por al menos diez años más.
Explicó que existen problemas estructurales que requieren procesos de décadas para ser superados. Puso como ejemplo la producción de conocimiento, que nos hace depender de países más desarrollados aún en nuestros tiempos. Destacó que del 2007 al 2017, durante su gobierno, se empezó a trabajar en ello con una gran inversión pública en educación, ciencia y tecnología que fue un ejemplo para América Latina, pero actualmente está siendo desmantelada.
Correa también habló sobre la expulsión del dirigente indigena Jaime Vargas de Pachakutik. Explicó que el apoyo brindado a la candidatura presidencial de UNES es por parte de la Confederación de Nacionalidades Indígenas (Conaie), mas no de su brazo político, el movimiento Pachakutik. “Decir que el correísmo quiera manejar la Conaie es descabellado. Los pueblos indígenas no son tontos, saben que vivían mucho mejor en la década ganada cuando había atención para cada rincón de la patria”.
Reitero que de ser invitado a formar parte del equipo asesor de Andrés Aráuz en caso de llegar a la primera magistratura del estado, lo hará vía telemática desde Bélgica, pues su plan de vida es continuar junto a su familia en el país natal de su esposa.