El ex mandatario ecuatoriano Rafael Correa dialogó con el medio digital español Furor Televisión, la política internacional fue el eje de la conversación.
A criterio del economista, América Latina vive una nueva realidad, “después de la caída del muro de Berlín aceptamos el neoliberalismo porque nos dijeron que no había alternativa, y fue un desastre. Hoy es diferente, a principios de siglo hubo varios gobiernos progresistas muy exitosos, tal vez fuimos víctimas de nuestro propio éxito porque creció la clase media que ahora vota por la derecha. Pero hoy en día la gente tiene con qué comparar y no se puede engañar a todos, todo el tiempo. Hoy la izquierda disputa el poder”.
El ex presidente tiene la convicción de que la Unasur debe recuperarse para lograr lo que llama una “integración integral”, que hubiera sido muy útil para tomar acciones conjuntas de lucha contra la pandemia.
Afirma también que no se debe subestimar la capacidad de supervivencia del neoliberalismo, pese al pésimo manejo de la pandemia que tuvieron los gobiernos de esa tendencia. “Creo que la crisis del coronavirus le ha dado la razón al progresismo sobre la importancia del estado, de la acción colectiva, que hay cosas que no son mercancía sino derechos y se necesita un estado que los garantice, uno de ellos es el derecho a la salud”.
Otro de los temas tratados fue la ley de comunicación que, en Ecuador, se aprobó durante el gobierno de Rafael Correa. Él cree que esta es aplicable en otros contextos internacionales para regular la concentración de poder de las élites sobre los medios, pues “para que haya democracia todo poder debe tener un contrapoder, regulación y leyes”.
Ante la cuestión de una eventual candidatura en las elecciones del 2025, dijo que tendría que consultarlo con su familia que hoy en día reside en Bélgica. Lo que sí aseguró es que le gustaría regresar al país temporalmente una vez que se resuelvan sus procesos judiciales, pues actualmente pesa sobre él una orden de detención debido a la sentencia que se le dictó por “influjo psíquico”.
Sobre la situación política del Ecuador, cree que pese a la inestabilidad y crisis que enfrenta el país, los poderes fácticos van a sostener el gobierno de Guillermo Lasso, tal como lo hicieron con Moreno, pese a que la Constitución contempla la posibilidad de anticipar elecciones por grave conmoción social o política. “En América Latina el poder lo concentran las élites y los poderes fácticos, ganar las elecciones no siempre implica ganar el poder”.
En cuanto a la relación de Estados Unidos con América Latina durante el mandato de Joe Biden, opinó que “puede que al interior de Estados Unidos un demócrata como Biden marque diferencia de un tipo como Trump, pero a nivel de política internacional eso tiene vida propia independientemente del gobierno que esté a la cabeza, sobre todo hacia América Latina, la política migratoria no ha cambiado”.
Su pensamiento sobre el gobierno de España, es similar. “Sigue la persecución a Venezuela, España fue cómplice de Moreno, para mi ha sido una gran decepción el gobierno de Pedro Sánchez.