Para entender lo que está pasando políticamente en toda América Latina, es necesario mirar la historia de los Estados Unidos. A pesar de su estatus como la democracia más antigua del mundo, Estados Unidos tardaron siglos para cumplir con los principios de igualdad y libertad consagrados en su Constitución. Como una economía incipiente, esta nación protegió de múltiples maneras su economía, lo que hizo posible su industrialización. América Latina está apenas siguiendo los primeros pasos del desarrollo, y para ello los gobiernos deben proteger, promover e incentivar la economía nacional, fuente de riqueza y bienestar para la ciudadanía.
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